Introducción

La tecnología transformó por completo la forma en que operan las empresas de mantenimiento y/o fabricación de ascensores. En este contexto, contar con un sistema de gestión integral ya no es una opción, sino una herramienta estratégica clave para mejorar la eficiencia, reducir costos y tomar mejores decisiones basadas en datos.

¿Por qué un sistema de gestión integral marca la diferencia?

La velocidad a la que evolucionan las exigencias del mercado, los clientes y el propio Estado, obliga a las empresas a usar sus herramientas tecnológicas de manera óptima. En el caso de la gestión empresarial, esto implica aprovechar al máximo las funcionalidades del sistema, capacitar a los equipos y retroalimentar al proveedor para que el software evolucione junto con la empresa.

Un problema común es la subutilización del sistema: “no tenemos tiempo para registrar esto”, es una frase habitual. Sin embargo, en muchos casos, esa información se registra igual… pero en planillas o medios externos que dispersan los datos y dificultan el análisis. En el peor de los escenarios, no se registra en absoluto, lo que representa una pérdida irrecuperable de información valiosa.

¿Qué ventajas ofrece un sistema de gestión integral?

Comparado con metodologías descentralizadas (como planillas de cálculo), un sistema integral técnico-administrativo-contable ofrece numerosos beneficios:

• Disponibilidad de datos en todo momento, incluso de forma remota.
  
  

• Seguridad de la información, con backups automáticos y configurables.
  
  

• Información integrada, con posibilidad de cruzar datos técnicos y contables.
  
  

• Toma de decisiones basada en análisis reales, no en suposiciones.
  
  

• Control de acceso por usuario, resguardando información sensible.
  
  

La integración de datos permite optimizar cada etapa del proceso, desde el mantenimiento técnico hasta la contabilidad, impactando directamente en la rentabilidad de la empresa.

Tecnología sí, pero con personas capacitadas

Para que estas herramientas generen los beneficios esperados, deben ser utilizadas por personal capacitado. Por eso, la formación interna y el soporte del proveedor son claves para alcanzar el potencial completo del sistema.

Conclusión: tecnología, procesos y personas

Contar con un sistema de gestión integral no es imprescindible para operar una empresa de ascensores… pero sí es esencial para hacerlo de manera eficiente, rentable y estratégica. Invertir en tecnología y capacitar a los equipos es apostar por una empresa que evoluciona y se adapta al cambio.